Natsu, sobrio y discreto, tiene una personalidad tímida que no se puede negar. Un día, se confiesa a Sato, quien está en el mismo departamento, y comienzan a salir. Natsu, quien suele usar gafas sencillas y cabello despeinado, es descubierto por el gerente al ver que Natsu es atractivo, y al día siguiente comienza el acoso sexual excesivo. Natsu, quien no puede negarse, desarrolla gradualmente sus pechos y cae en el placer de inmediato mientras ella entrena su constitución.