Siendo un estudiante universitario virgen y aburrido, pensé que si cambiaba de ambiente podría tener una buena relación, así que decidí vivir solo. Unos días después de mudarme, conocí a Aoi, una mujer casada que vivía en la habitación de al lado. Aoi me fascinó, pues era hermosa y algo indefensa. Anhelaba las mujeres y quería dejar la virginidad cuanto antes, así que quedé con una mujer en una app de citas. Ese día, la persona que estaba en el lugar de encuentro era Aoi, la mujer casada del vecino.